Cómo ajustar una silla de ruedas correctamente para el usuario
Ajustar una silla de ruedas es una parte esencial para mantener el confort y la calidad de vida del usuario. Además, escoger la adecuada y mantener una buena postura en ella será definitorio. Utilizar una silla de ruedas de forma inadecuada puede traer consigo lesiones y dolores de gravedad. Es importante que conozca cómo mantener cómodo al usuario de silla de ruedas. Estas son algunas ideas al respecto.
¿Cómo saber qué silla de ruedas es la indicada?
Escoger la adecuada tendrá un gran impacto en el bienestar de la persona. Le evitará problemas de postura, úlceras por presión, incomodidad, problemas pélvicos, de columna y cadera. Para evitar estos riesgos asociados, conviene seguir los siguientes pasos:
- Mida la cadera del usuario del asiento y súmele 5 centímetros para tener un rango de movimiento y adaptación.
- Para elegir el reposabrazos, es conveniente tener en cuenta la actividad de la persona discapacitada. ¿Estará frente a un escritorio? ¿Necesitará levantarse con frecuencia? El largo ideal se consigue midiendo desde el codo hasta la punta del dedo índice y sumando un par de centímetros de margen. Los reposabrazos de altura variable son los más indicados.
- En el caso del reposapiés, la operación es similar. Mida desde la parte posterior de la rodilla hasta el talón del pie para hacerse una idea de la longitud. De acuerdo al tipo de dolencia, puede recomendarse un reposapiés elevable o articulado.
- Para el respaldo, una vez sentada la persona, la medida clave está desde la clavícula hasta el asiento. El paciente puede requerir soporte lumbar adicional de acuerdo al criterio médico.
- El último criterio a considerar es el peso de la persona y la silla. Por una parte, la fuerza de la persona que la empleará y, por otra, el peso máximo que tolera el dispositivo.
Ventajas de elegir una silla de ruedas ideal
El paciente agradecerá mucho contar con un soporte pensado para él o ella. Estas son algunas de las razones por las que el paciente se encontrará mejor:
- Presiones del cuerpo distribuidas: estar sentado genera presión en toda la región inferior del cuerpo. Minimizar su impacto en la salud ahorra dolores, molestias e incluso úlceras.
- Estabilidad y movilidad: ya estar postrado es una limitación. Si se trata de un dispositivo adaptado, la persona contará con mucha más libertad de movimiento. El equilibrio y una sedestación cómoda evitan, a la larga, la mala postura.
- Correcta orientación pélvica: esta zona del cuerpo es clave en la sedestación. Al mantenerse alineada con la columna y en posición soportada, se evitan lesiones.
Elegir la mejor silla de ruedas para los seres queridos no es una tarea complicada. No cabe duda de que le agradecerán tener en consideración su bienestar. Así, mantendrán una vida cómoda, llevadera y feliz.