Personas con movilidad reducida pensando en ahorrar en el consumo eléctrico
Las personas con movilidad reducida llevan toda la vida reclamando más accesibilidad e independencia. Una silla de ruedas eléctrica puede convertirse en la mejor forma de disfrutar de la vida cotidiana con independencia mientra realizamos un bajo consumo. Vamos a encontrar tres tipos principales de sillas eléctricas con ruedas: plegables, fijas o reclinables y basculantes. La elección del tipo más adaptado a nosotros depende de cómo queramos movernos y para qué vamos a necesitar ese medio de transporte.
¿Cuánto gastamos en accesorios para personas con movilidad reducida?
Las sillas de ruedas para personas con movilidad reducida tienen un precio muy variable. Debemos mirar las prestaciones de cada modelo, así como si nuestras elecciones cumplen las necesidades que tenemos. También conviene que tengamos en cuenta las medidas de la silla, puesto que algunas están adaptadas para personas estrechas de caderas (o niños) y otras son mucho más anchas. Hay otras características técnicas que también son importantes.
Pagar por la comodidad compensa cuando hablamos de la vida cotidiana sobre una silla de ruedas eléctrica
La comodidad debe ser una de las metas principales que tenemos que alcanzar cuando adquirimos una silla de ruedas porque la gente con movilidad reducida va a pasar muchas horas sentada en ese asiento. Por suerte para nosotros, cada vez cuentan con mejores materiales para garantizar la confortabilidad durante horas sin producir llagas o cualquier problema causado por no hacer cambios posturales de forma activa y constante. Cuantas más horas podamos pasar sin notar molestias, más cara será la silla.
Elegir sillas de ruedas eléctricas de bajo consumo nos aporta accesibilidad y un menor gasto de mantenimiento
Las sillas de ruedas eléctricas son más caras que las que no tienen motor. Cuantas más prestaciones tienen, más se encarece su coste. Estas características aportan confort a las personas que nos sentamos en los asientos, pero se mantienen solo de forma duradera en los artículos de alta calidad. No nos conviene escatimar en la compra de una silla de ruedas, porque es un producto que vamos a poder utilizar muchos años. Además, si la elegimos de bajo consumo eléctrico, estaremos ahorrando a la larga aún más.
En definitiva, las personas con movilidad reducida tenemos a nuestra disposición a día de hoy un abanico amplísimo de sillas de ruedas eléctricas entre las que escoger el modelo que más encaje con cada una de nuestras necesidades. A la hora de invertir en una silla nueva, debemos tener en cuenta cosas esenciales como el tamaño y las prestaciones, pero también otras que a simple vista no parecen tan obvias, como la comodidad después de muchas horas sentados y el bajo consumo eléctrico de su motor.