Celebra el 20 de marzo el Día de la felicidad con las personas con discapacidad o movilidad reducida
El 20 de marzo se celebra el Día Internacional de la Felicidad. Una iniciativa llevada acabo por el Reino de Bután que siente cómo la felicidad bruta anual es más primordial que el Producto Interior Bruto. Hay muchas formas de celebrarla y poner nuestro granito de arena, una de ellas es junto a las personas con discapacidad o movilidad reducida.
La importancia de la felicidad en nuestras vidas
Si hay un concepto en el mundo de tremenda importancia, ese es la felicidad. Debería ser un derecho que todos los que pasamos por el mundo consiguiéramos ser felices, a pesar de las dificultades propias que nos va poniendo la vida.
El sentir que tenemos un trabajo digno, nuestras necesidades básicas cubiertas y personas que nos quieren sería el gran paso a la felicidad. En este sentido, las personas mayores y aquellas que sufren alguna discapacidad se encuentran entre los grupos más vulnerables a la hora de conseguir este preciado tesoro. Y es que la falta de cariño, el no contar con todo lo que necesitan para su bienestar, como una silla de ruedas, por ejemplo, y el sentir que les falta salud pueden contribuir a que sientan que la felicidad no está dentro de ellos.
Por eso, celebrando el Día Internacional de la Felicidad somos más conscientes de que todos tenemos que ayudarnos para alcanzar tan preciado bien.
Debemos concienciarnos tanto desde un punto de vista individual como colectivo de que podemos contribuir a que los demás sean más felices y que los demás pueden ayudarnos a nosotros también a ello. Atendiendo correctamente desde los servicios de salud, ofreciendo una educación de calidad que ofrezca un apoyo emocional importante a cada uno de los alumnos, ayudando a nuestros abuelos y familiares con discapacidad en todo lo que necesiten...
Si todos somos conscientes de la importancia de la palabra felicidad en el mundo, podremos conseguir un mundo mejor. Es difícil, pero con iniciativas como estas, el Día de la Felicidad, que nos ayudan a reflexionar sobre esta cuestión, ya estamos dando un paso importante.
No podemos dejar de celebrar este día en las residencias de mayores, en los colegios, en los centros sanitarios ofreciendo nuestra mejor sonrisa y nuestro mejor servicio.
Es muy importante que este día sea una reflexión para los gobiernos y para cada uno de nosotros acerca de la importancia de una buena salud mental que se traduce en ser más felices. Aunque pueda resultar una utopía, podemos conseguirlo si empezamos a pensar acerca de ello.
Celebrar el Día Internacional de la Felicidad con personas con discapacidad o movilidad reducida es una de las mejores iniciativas que podemos llevar de manera individual.