Sexo sin límites en silla de ruedas
¡Sexo en silla de ruedas, Sexo sin límites!
“Un día para un Carnaval conocí a una chica con la que finalmente terminamos con nuestro rollo y no hacia otra cosa que preguntarme todo el rato ‘¿Pero tú follas?’, Yo le respondía: ¿Pero por qué no? para mí eso es ignorancia, pensar que una persona en silla de ruedas no pueda tener sexo”. Es la experiencia de Dani Martínez, un joven de 27 años que actualmente hace uso de silla de ruedas, debido a que tiene la condición de paraplejia nivel T-6, ya que por a un accidente de tránsito resultó con la médula afectada.
Hay personas que, al ver a alguien en silla de ruedas, piensan que estás no son capaces de tener sexo, sin embargo, tampoco investigan más allá de lo que piensan. Aquí os explicamos algunos aspectos de la sexualidad en las personas con movilidad reducida.
Una persona puede hacer uso de una silla de ruedas por diferentes circunstancias, por ejemplo, debido a una amputación de una o dos piernas, una lesión de cadera o una lesión medular, sin embargo, es importante saber que, dependiendo de la lesión, necesitará mayor o menor ayuda para tener sexo. Pero, en cualquier caso, las personas con ciertas limitaciones de movilidad, pueden ser capaces de tener sexo.
En el caso de la lesión medular, donde las personas tienen una condición de paraplejia o tetraplejia, pueden vivir la sexualidad de una manera diferente, es decir, lo que varía en estos casos es la conexión que tiene el cerebro con los genitales, sin embargo, eso no es alarmante ya que, para los seres humanos, el órgano más importante en la sexualidad es el cerebro.
En el caso de las personas que hacen uso de silla de ruedas por una amputación, ningún nervio medular afecta la conexión del celebro con los genitales, por lo tanto, no es necesaria una ayuda para la erección de los genitales. Ha no ser que lo requiera por otros motivos que no tengan relación con la movilidad reducida.
“Es algo tan radical que tiende a explicar todo lo de la persona. Lo cual en realidad no explica nada, sólo es una proyección que hacemos y todo lo justificamos con eso, a veces sí y otras veces no. Entonces, si no estudias es porque tienes diversidad funcional. Si estudias también es porque tienes diversidad funcional, porque no tienes otra cosa que hacer. Si no ligas es porque tienes diversidad funcional, si ligas, también es porque tienes diversidad funcional y llamas la atención”, comentó Antonio Centeno, activista social del Movimiento de Vida Independiente, que hace uso de una silla de ruedas. Participó en un documental sobre sexualidad y diversidad funcional llamado «Yes, we fuck!».
Según Antonio, sobre el tema de la sexualidad de las personas con movilidad reducida se han creado diferentes mitos y prejuicios que han estado alejados de la veracidad de los hechos.
Dani Martínez expresa. “La gente tiene muchos prejuicios a la hora de ver a una persona con discapacidad, si ven a un chico en silla de ruedas no se dignan ni a querer conocerlo, es por eso que a la hora de ligar también cuesta muchos más, o te reúnes en el mismo ámbito de amistades donde te puedan conocer un poco y de ahí pueda salir algo, o cuesta mucho más”.
Frente a lo que expresó Dani anteriormente, para Antonio es muy importante tratar de ser libres a la hora de actuar y tomar decisiones “si una persona con diversidad funcional lo que quiere es relacionarse de alguna manera con chicas, pues tendrá que buscar la manera de hacerlo. Decir que no funciona, eso es una teoría que tienen las personas, yo digo que vivan que se busquen sus rollos”.
Según Antonio no se trata de prejuicios, es lo que se entienda como sexualidad, es decir, que papel se supone que juega cada género y enfatizó: “El cuerpo, la sexualidad, los vínculos y encontrar alternativas a esa idea del amor romántico, son cosas que están por construir haciendo aportaciones a la diversidad funcional. En general todo lo bueno y lo malo es explicado por el estigma. De modo que te responsabiliza y te deshumaniza completamente”.
“El primer filtro es el físico, hay unos que no filtran y yo no me considero una persona fea, pero por ir en silla de ruedas ya me ven muchos filtros”, afirmó Dani Martínez
¿Cómo tienen sexo una persona en con una lesión medular?
EN LOS HOMBRES
Sencillo en los hombres la lesión medular afecta el impulso que va hacia el pene y el que viene de él, donde queda comprometido la capacidad de sentir, de erección y eyaculación. En la erección, puede que en ocasiones sea difícil generarla o mantenerla, existen técnicas y maneras de generarlas, para mantenerlas como la estimulación, técnicas artificiales como medicamentos en pastillas e inyecciones o aparatos como estimuladores o válvulas, sin embargo, esto no asegura la capacidad de sentir.
En algunas personas, la eyaculando es normal en otras no, sin embargo, el semen seguirá produciéndose y evacuándose con la orina o se podrá extraer con técnicas en el momento de necesitarlo.
EN LAS MUJERES
En las mujeres, la lesión medular afecta el impulso que va y viene de la vagina comprometiendo la capacidad de sentir, lubricar, claro que para esto también existen técnicas de lubricación como aceites basados en agua, gel lubricante entre otros. En los dos géneros, es fundamental valorar las zonas erógenas que están por encima de la lesión. Por otro lado está el tema de tener hijos, lo cual es algo que pueden hacer sin dificultad alguna, puesto que una lesión medular no afecta el sistema reproductor femenino. Es más, hay mujeres que no usan silla de ruedas y no pueden tener hijos por diferentes factores de salud, es por eso, que resulta ignorante pesar que las mujeres que van en silla de ruedas, no puedan dar a luz a un bebé.
“Hay gente que tiene problemas y otras no tanto, es función de la paraplejia que se tenga, son muchos los factores que influyen. No hay que generalizar, que por ir en silla de ruedas no puedas tener sexo”, expresó Dani Martínez.
El tema del sexo en silla de ruedas va más allá de una explicación, se debe forjar un cambio a nivel cultural respecto a los prejuicios que existen a su alrededor, Antonio concluye diciendo “Entonces yo lo que digo es que da igual el mundo no está para entenderlo, esta para vivirlo. Entonces qué más da cual sea la explicación”.
Aunque se tenga una idea errada sobre el sexo en personas con diversidad funcional, testimonios como los de Antonio y Dani, son muy significativos para aclarar prejuicios y mitos que van forjando una sociedad más inequitativa y discriminatoria, pero esta idea se puede cambiar, cuando estemos dispuestos a entender y escuchar los sentimientos y opiniones de las personas con diversidad funcional, así lograremos construir una sociedad justa, unida y potencialmente liberadora.