Guía sobre ortopedia y materiales
La ortopedia brinda una serie de aparatos de distinto tamaño y diferente nivel de sofisticación. Las funciones básicas de estos equipos son servir de soporte para la deambulación o corregir posturas, por lo que tienen indicación para personas de cualquier edad, en varias ramas de la medicina y en la odontología.
Tipos de ortopedia
Los aparatos ortopédicos pueden clasificarse de varias maneras. Globalmente se pueden definir como dispositivos externos que están diseñados para modificar o reforzar estructuras y funciones del sistema musculoesquelético.
Según su utilidad pueden distinguirse cuatro clases. Las protectoras tienen como función mantener la postura de alineación de un miembro lesionado. Las férulas son las de uso más frecuente y las hay para todos los segmentos corporales.
Las funcionales o dinámicas llevan en su estructura una parte elástica que ayuda a movilizar un segmento que carece de fuerza. Las ortesis de extensión para secuelas de las fracturas de la mano son un ejemplo. Las correctoras se utilizan para subsanar o compensar las malformaciones del esqueleto. Generalmente se indican a edades tempranas. Los corsés ortopédicos para corregir la escoliosis entran dentro de esta clasificación.
Las ortesis estabilizadoras inmovilizan el segmento corporal a fin de mantener una posición fija. Tienen varias indicaciones: suprimen los movimientos no deseados, actúan como soporte y angostan los ángulos articulares cuando hay inflamación y dolor. Un ejemplo son las rodilleras articuladas.
Principales materiales
Existen diferentes materiales que se utilizan para fabricar estos aparatos. La indicación depende de muchos factores, pero lo que se busca es que sean fáciles de poner o quitar y no deben causar rozamiento, compresión o incomodidad.
El aluminio es muy utilizado por ser liviano y resistente. El polietileno y el polipropileno tienen la ventaja de ser transparentes a los rayos X y fáciles de amoldar. El acero inoxidable presenta gran resistencia frente al uso y se puede soldar, pero suele ser pesado. El neopreno mantiene el calor y es muy elástico, por lo que no limita los movimientos.
Ortopedia para personas mayores
Las personas de la tercera edad pueden requerir equipos que pueden adquirir en la farmacia o en lugares más especializados. Las ayudas para caminar o para problemas más específicos son de muy variada naturaleza.
Las sillas de ruedas pueden ser eléctricas o manuales y están diseñadas para adaptarse a distintas necesidades con partes abatibles o ajustables. Suelen ser plegables, livianas y muy resistentes gracias al acero o al aluminio con que se fabrican. Los andadores son otra ayuda que puede ser indispensable para caminar. Pueden adquirirse con o sin asiento y hay la opción de que tengan dos o cuatro ruedas.
Los bastones y muletas son otras ayudas para caminar que se necesitan con mucha frecuencia. Sirven para mantener el equilibrio y para descargar el peso del miembro lesionado. Son ajustables para adaptar la altura a la de la persona y vienen equipadas con empuñaduras y zonas de contacto ergonómicas y almohadilladas, esto con el fin de dar más comodidad y evitar lesiones.
La diversidad de equipos y ayudas que proporciona la ortopedia permite encontrar lo más adecuado para cada necesidad. Es una manera de ayudar a las personas a tener más independencia.