Baile en silla de ruedas – «EL BAILE, MI DEPORTE»
EL BAILE, MI DEPORTE
“Mi marido me motivo para practicar el baile en silla de ruedas” dice Luisa Huidobro, una mujer muy activa que lleva cuatro años practicando “wheelchair dancing”, es decir, baile en silla de ruedas.
Luisa asiste a la academia de baile llamada CBE FIPBALL, la cual se encuentra ubicada en Sant Boi de Llobregat (Barcelona). “Actualmente, hasta donde nosotros sepamos, es la única academia que tiene bailarines en la modalidad de wheelchair que estén en activo” comenta Luisa. La música es algo que le encanta, dice que no puede vivir sin ella. Sin embargo, eso de ponerse a bailar delante de personas, donde muchas pueden juzgar es algo que a ella le ha costado superar. “Empezamos como de “vega va vamos a probar” y a fecha de hoy aquí estamos.” Comenta Luisa. Uno de los problemas que hay en España a la hora de practicar wheelchair dancing, según Luisa, es que esta modalidad apenas tiene difusión. Hay muchas personas que, aunque les interesa, no encuentran lugares donde poder aprender. Esto es un gran problema con respecto a otros deportes que también se practican en silla de ruedas y que tienen más exposición y divulgación. “Tú vas a Italia y todo el que está en una silla de ruedas baila.” Asegura Luisa. Según Luisa, la mayoría de personas que bailan pero que no va en silla de ruedas, ya tienen su pareja de baile y es difícil que cambien. Es por este motivo que resulta muy complicado para las personas que practican wheelchair dancing encontrar una pareja de pie. Las sillas de ruedas que utiliza Luisa y su marido para bailar son sillas de calle. Debido a que buscan que sean más ligeras y más económicas que las sillas destinadas al baile. “Si vierais las sillas que utilizan los extranjeros de baile, fliparíais en colores, no tienen nada que ver con esto”. Comenta Luisa. Las silla de ruedas profesionales de baile vienen dependiendo de la discapacidad que tengan las personas. Por ejemplo, hay personas a las que les resulta muy difícil hacer “el caballito”, es decir, levantar la parte delantera de la silla y por esto llevan unas ruedas traseras “antivuelco”. En las sillas de baile, las ruedas antivuelco son fundamentales ya que también hacen que la silla gire más.
Para Luisa, sus profesores son muy importantes para su formación y esto es lo que comenta de ellos “¡Nuestros profesores son muy buenos! está el profe que hace la técnica y la profe que es la que realiza las coreografías”.
Con la intención de que las personas vean esta modalidad de baile, Luisa y su marido, van donde los llamen, sin importar el lugar o la superficie que tenga. “Lo normal para bailar con silla, es que necesites desplazarte mucho. Por eso es necesario que el suelo sea liso, pero no nos negamos a ir a ningún sitio para que la gente vea que se puede hacer”. Comenta Luisa. Luisa les manda un mensaje a las personas que usen silla de ruedas y les guste la música. “Que lo prueben, eso es importante. Luego deciden sí o no, pero si te gusta la música lo pasas muy bien”.
